Hasta la municipalidad de Futrono llegaron nuevamente esta mañana representantes del movimiento que rechaza de manera categórica el cobro “arbitrario” de estacionamiento en prácticamente toda la extensión de calle Balmaceda, para exponer con una carta formal sus requerimientos y molestia con las autoridades.
La principal queja es contra la autoridad comunal, el alcalde Claudio Lavado, pues a juicio de los detractores, ha hecho oídos sordos a una reclamación ciudadana con amplio respaldo de comerciantes, artesanos, residentes y vecinos de la comuna que han brindado su apoyo y manifestado su rechazo.
FALTAS A LA VERDAD
Hasta el recinto llegó un grupo de alrededor de 12 personas, quienes, junto con entregar la carta al alcalde y concejales, enrostraron las faltas a la verdad de la autoridad comunal y la falta de transparencia en todo el proceso de instalación de la empresa privada que se encarga de realizar los cobros.
El alcalde nos manifestó que no era posible revertir los cobros porque había contratos firmados, sin embargo, en el Austral (AustralValdivia) dijo otra cosa, que era llegar y ponerle término. ¿Cuál es la verdad?, dijo el líder del movimiento. Jorge Uribe.
A su llegada, alrededor de las 9 de la mañana, se encontraron con un inusual contingente de carabineros, con alrededor de 8 uniformados que deambulaban por el recinto municipal. “No sabemos qué es lo que pretenden con esto, nosotros lo único que queremos es mostrar lo que está ocurriendo desde que decidieron implantar esta ordenanza, medida que no fue consultada con nadie y que se decidió en cuatro paredes”, añadió.
Ya al interior del concejo la situación se tornó álgida, pues los manifestantes tuvieron duras palabras hacia los concejales que aprobaron la ordenanza y también para la máxima autoridad comunal.
“Aquí se está lucrando con la gente de la comuna, con los comerciantes que pagan regularmente sus patentes y permisos, hay alguien en este municipio que está vulnerando el sistema en beneficio propio”, señalaron en sus demandas a las autoridades.
En la instancia la concejala Marisol Bahamóndez intentó desacreditar al movimiento, señalando que se trata de un grupo minoritario de personas, desconociendo las más de 300 firmas reunidas a días de iniciado el cobro.
“Esto no se trata de pelear por cualquier cosa, estamos luchando por nuestros derechos y los de los demás, no pueden llegar a imponernos cosas, menos cuando están en sus puestos por los votos y confianza que les entregamos. Nunca hemos dicho que no aceptamos el cobro, siempre y cuando sea justo para todos, con participación ciudadana y no el más caro de la región", agregó el comerciante.
El alcalde, por su parte, dijo a los presentes que se les responderá por escrito, pues no puede pronunciarse al respecto, respuesta que llevó a la agrupación a interpretar sus palabras como negativas y anunciaron que comenzarán a manifestarse con mayor fuerza.
Así también el concejal Flández, respecto al tenso momento, señaló que: "Se nos informó que se hacía trato directo con esta empresa porque no había una base de datos para licitar, sin embargo, en la prensa el alcalde señaló que la razón del trato era por ser un plan piloto al que se le podía poner término en cualquier minuto, situación que no se informó en concejo, y luego a los comerciantes les dice que no se puede revertir. Por lo tanto, las improvisaciones y el mal manejo son motivo suficiente para desconfiar y aclarar el tema de los gastos, los efectos en el comercio y luego tomar una decisión. No sé en qué minuto se perdieron los objetivos de ordenar calle Balmaceda, para trasformar esto en un negocio”, concluyó el edil.
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