Comercio en pie de guerra por cobro de estacionamiento en Futrono

Concejal y ex alcalde Jorge Tatter solicitó dejar sin efecto la medida: “Fue apresurada y no están dadas las condiciones”

Con más de 200 firmas en rechazo a la ordenanza municipal de cobro de estacionamiento en calle Balmaceda de Futrono, comerciantes y vecinos de la principal arteria de la ciudad, manifestaron su rotundo rechazo a la medida impuesta por la administración del alcalde Claudio Lavado respecto al ordenamiento de la transitada vía y que en tiempo record fue aprobada por el Concejo Municipal.

El comerciante Jorge Uribe es quien lidera el movimiento que está en pie de guerra contra la ordenanza, y lo han expresado a través de una misiva con las respectivas firmas de comerciantes y residentes que se verán afectados directamente por el cobro que “a todas luces fue impuesto ya que no hubo participación ciudadana ni se consideró el parecer de los principales afectados con esta medida arbitraria, ni menos de quienes lo elegimos como alcalde”, dijo el comerciante.

Igualmente señaló que no entiende cómo una decisión tan importante puede ser tomada entre cuatro paredes, más aún cuando no hay otro lugar de estacionamiento, cuando no hay un terminal de buses o zonas delimitadas para fleteros ni residentes y que se informa con folletos que ni siquiera dicen cuánto se va a cobrar, qué tipo de información es esa. “Cuando uno impone cosas debe también ofrecer, y acá no se ha dado una solución a cambio para los transportistas, comerciantes ni mucho menos para residentes”, dijo Uribe.

“Esto no sólo me preocupa a mí, esto nos afecta a todos quienes residen o trabajan en calle Balmaceda, y principalmente afectará a las personas de menos recursos, porque pagar 400 mil pesos de estacionamiento fuera de ser irrisorio, tendrá una repercusión en el encarecimiento de los productos que comercializamos”, añadió.

Finalmente dijo no estar en contra del ordenamiento, sino en la manera poco prolija que se pretende implementar, incluso dijo estar de acuerdo con el cobro en temporada estival, porque están dispuestos a hacer un sacrificio, pero no durante todo el año, más aún cuando los ingresos serán para un privado y no para el municipio o para una institución como bomberos que es lo que se ha implementado en otras comunas.

 “Si a nosotros no nos toman en cuenta vamos a instruir a todos quienes se ven afectados a sacar los permisos de circulación en otras comunas, en respuesta a la medida arbitraria que se ha tomado. Nos pasaron a dejar folletos que ni siquiera decía los valores, o sea qué tipo de información es esa. La concejala Bahamóndez dijo que iba a costar 250 pesos y eso no es así porque 1 hora tendrá un costo mil 200 pesos, en mi caso serán 16 mil pesos las 11 horas que tengo estacionado mi vehículo, que es mi herramienta de trabajo con la que hago despachos.

CONCEJAL JORGE TATTER SOLICITÓ DEJAR SIN EFECTO LA MEDIDA

Quien también alzó la voz fue el concejal UDI Jorge Tatter (ex alcalde) quien junto con reconocer que fue un error aprobar la ordenanza, aclaró que no hubo consulta ciudadana y que no están dadas las condiciones para implementarla, menos durante todo el año.

“La ordenanza fue aprobada por todo el concejo y en eso hay que hacer un mea culpa, pero fue por desconocimiento ya que se hizo con mucha premura, no se estudiaron en detalle los reales alcances de su implementación, cómo se verán afectadas las calles laterales, el comercio y la ciudad en general.

Indicó que pese a haber aprobado en primera instancia el ordenamiento, solicitaron al alcalde dejar sin efecto la medida. “Estamos aún a la espera de la respuesta”, finalizó.

Mientras que el concejal PPD, Fernando Flández, pese a estar de acuerdo con el ordenamiento de calle Balmaceda, coincidió con el edil Tatter en que fue una medida apresurada. Además, aclaró que los ingresos no serán para la municipalidad, sino que para el contratista, que en este caso se trata de una empresa proveniente de Valdivia, con quien se habría realizado un trato directo y no una licitación.

Cabe señalar que la ordenanza entró en vigencia el pasado 2 de enero, sin embargo, aún no se inician los cobros.